RAMÓN LLANES

BLOG DE ARTE Y LITERATURA

lunes, 30 de junio de 2014

EN MEMORIA DE FÉLIX BELZUNCE.


EN MEMORIA DE FÉLIX BELZUNCE

 

            Me llega, con estupor, la noticia de su muerte que, al pronto, me incita al pensamiento sobre su estancia en esta vida por aquella misión humana de hacer destacar de quienes nos dejan, todo lo bueno en su conducta. Mal trago este por dos importantes razones, la primera porque Félix fue mi amigo hasta el punto que nuestra tanta intimidad nos hacía llamarnos “compadres”. Y la segunda razón porque no nos debe mover el espíritu crítico sobre una persona que ya no está, considerando de mal talante traerle a un foro público sin su consentimiento.

            Solo diré que nuestra amistad se forjó desde el trabajo y desde la complicidad de entendernos ambos “animales de la cultura” siempre adeptos a tales fantasías. Y diré que nos unimos, nos comprometimos y compartimos amistad y danza al mismo tiempo hasta desgranarnos en esta simbología real durante el resto de su vida.

            Ahora se ha ido Félix y yo he quedado y no tengo más remedio, por mi propia voluntad y honor, de transmitir hacia él una declaración de profundo respeto porque hizo más de muchas cosas muy bien y porque se comprometió como un alentador de los valores de su Villablanca elevando su prestigio casi al infinito. No más que buenos recuerdos, vivencias, atenciones y afectos puedo conservar de mi amigo Félix y por tal última razón le dedico este sentimiento.

            Ramón Llanes 30.6.14.

sábado, 28 de junio de 2014

EN MEMORIA DE MANOLITA MONTERDE


EN MEMORIA DE MANOLITA MONTERDE


Un adiós afectuoso se prende en el aire de Tharsis para dedicarle el respeto que merece a una mujer sobradamente buena y exquisitamente amable. No sabemos qué estaría escrito en su destino ni sabemos si la vida le ha devuelto en felicidad todo lo que ella ha dado en entrega pero sabemos que ha vivido sus sueños hasta su último aliento de la misma manera fiel y ética que compartiera con todos su ternura en su tiempo de existencia.
Recordaremos a Manolita desde la nostalgia más pura, desde sus colores, desde sus poemas de sentimientos tan pegados siempre a su “hacer el bien” como única fórmula válida. Perdemos en la mina a una emprendedora de todas la virtudes, perdemos la voz tímida de una mujer inquebrantable y perdemos un poco de la paz que tanto transmitiera.
Un adiós será poco tributo, mejor escribir su verdad de amor por cada filón y por cada amasijo de bondades, mejor ponerle su ejemplo a todas las esquinas de su pueblo amado y rendirle un homenaje perpetuo por su merecimiento, por su humanidad, por su fuerza combatiendo adversidades.
Aquí se le dejan abiertas todas las puertas de las buenas conciencias y adonde vaya le estarán esperando con una fiesta. Gracias por todo, siempre.


Ramón Llanes. 28.6.14.

viernes, 27 de junio de 2014

LOS EGÓLATRAS


PUENTE DE LAGUNAZO. THARSIS


DE LA FANTASÍA A LA REALIDAD





Hoy me levanté cálido, soportable y práctico; miré las nubecillas desafiantes que no anunciaban tormenta y me propuse pasar de la fantasía a la realidad. Y como estoy en Huelva, compuse mi metáfora de asiento a través de las vibraciones que esta tierra me transmite.
Hice el camino desde Santa Fe al puerto, avenida de mis pasos largos por la luz de este tiempo febril y cálido, cabezo de la esperanza, las acacias ya con sus hojas, la cuesta de los penitentes que se agarran a su fe, el mirador nativo de nuestro conquero avisando a las aguas de sus cauces. Luego en el germinal verdor de Moret y en los recuerdos de la calle Canarías desde donde comencé a enlazarme con Huelva.Quedan más lejos y tan cerca los lugares que nos descubrieron, donde están las barcas y la mar salada, quedan los horizontes extendidos en la ría, mi paseo va con mi propio sueño, se me hace más completa la melancolía en los esteros de saltés, vuelvo a mi edén querido y redescubro por milésima vez la felicidad que me produce vivir en este único y pasional sitio llamado Huelva.

Ramón Llanes. diariodehuelva.es

ARENA PISADA


Arena pisada

Huellas
Estarás con los ojos puestos en el único horizonte que te deja la mar, lejano, inalcanzable, como los deseos, como los sueños; pero tendrás los pies acariciados de arena húmeda, en la ola que no se cansa de mojarte, en el trazo de la brisa. O tendrás las manos troquelando una figura surgida de tu entusiasmo, pero habrás conocido cómo se toca una piel imperfecta. O tendrás el pensamiento pendiente de un espasmo que alerte la consigna de un tiempo que nace para no perderse. O estarás en el pico más alto de una nube sin agua esperando un resultado de descanso, pero sabrás que de la nube se cae, a veces. O irás a las cumbres, a los roquedos, a las correntías, a pactar con tu conciencia, pero la luz la llevarás en los morrales, inquieta y avispada.
Andarás campos, cornisas, planicies, hasta que todo aquello parezca libertad, donde el grito tenga siempre la respuesta del eco y sea impúdico volver. Allá, donde estén los materiales del universo, arena pisada, luz soberbia, deseos corrientes, la vista alargará la tarde y se dejará querer si se abraza; mientras, los huracanes dejados pasarán a la moda antigua, a la despensa.
Alguien tocará tu espalda anunciando el regreso y desde entonces lo cotidiano te será mediocre e insulso, pero no habrás olvidado la complicidad con la arena, con tu tiempo, contigo.
Ramón Llanes. Huelvahoy.com

jueves, 26 de junio de 2014

EN LAS PIEDRAS


VEN A HUELVA


Ven a Huelva

26 junio 2014
Ramón Llanes. 

Mejor ahora, para presumir de paisaje, para invitar. Las bellezas no están lejos que a esta tierra, (a veces –dicen- apática, –nunca indolente-), rodean laderas, extremos y mar abierto con una exégesis de especialidad estética que la hacen seductora e irresistible hasta el mismísimo tuétano. Y luego del manjar natural que en la acera sur se resume en pinar, orilla, agua salada, espejismo y playa, por la Campiña se divisa la fantasía de los pueblos, con églogas de tiempos, con sonoridad de valores, con dólmenes, campos, viñedos y suculencia de amparos; subiendo van asomando las minas, esas cortas inmensas que están allí templando el bienestar de los hombres y poniendo las mitologías del sustento en su sitio. Y en la más altura huele a jamón, a encinar, a leña y devociones.
La provincia enseña sus dones sin esquivar los tesoros ni ocultar la nobleza del reinado de los seres humanos que se prenden a la tierra como la más expresiva dotación de excelencia que ella guarda para todos los momentos, sea Sierra, Andévalo, Costa o Condado, que en cada cortina y emblema la costumbre es hospitalidad y agrado.
Es privilegio vivirla uno tras otro todos los calendarios que anuncian los solsticios pero es más privilegio ser hacedor de ella, protagonista delesplendor, de su compostura y de los contrastes que la encumbran. Volvieron quienes lo saben, estuvieron atentos a su evolución quienes sestearon en las adormileras de cualquier edad y se quedaron quienes comprendieron su eficacia para la sanación o equilibrio del espíritu.
Más que nunca, ahora, que la luz es envolvente y mística; ahora que nadie puede tergiversar los planos mágicos de esta tierra inusual, ahora es cuando también invitamos: ven a Huelva; ven y no extrañaremos tu presencia; ven ahora que estamos casi todos y verás cómo son aquí las miradas, los crepúsculos y los abrazos.
huelvabuenasnoticias.com

miércoles, 25 de junio de 2014

LAS SOMBRAS


AHORA





Ahora, de pronto, no me importa el miedo
ni la luz que descarga su agonía en el agua
ni morir sintiéndome nacido.
Ahora, de rabia, no me importa el grito
ni haber conspirado en una guerra contra mí
ni ser el destructor de la moneda.
Ahora, de soberbio, no me importa el mundo
ni la última canción que bailé con un beso
ni la ropa que le han puesto a los dioses falseados.
Ahora, de guasa, no me importa el humor
ni el amor que desaparece sin tenerlo
ni ahogarme en la bañera.
Ahora, de avaro, no me importa que no se lea este poema
ni me importa cerrar la puerta para no gastar mi aire
ni salir a buscarte para alegrar mi olvido.
Ahora, de memo, no me importa escribir sin mirarte
ni volverme loco para que me entiendan
ni desear que me traigan una piedra dormida.
Ahora, de poeta, lo único que me importa
es encenderle una sombra a los vencejos.

Rllanes

REFLEXIONES EN YUSTE


REFLEXIONES EN YUSTE.



El volumen de tiempo con traje de agobio
me manda a un infinito, al donde nadie sabe
que el tiempo es la eternidad y solo allí lo notas,
a donde algo se te paraliza y tampoco sabes qué es,
a donde solo necesitas ganas para llegar
y poco menos para vivir;
a este sinfín me manda el tiempo,
y yo dejo la mar
y los olores a prisas, tomo las cosas fáciles
y me encamino. Equipaje de cuadernos y libros,
ropa de estar, pluma y deseos de calma.
Y llego cuando el frío existe en esta eternidad
o vive aquí, cuando aún huele a aposento de emperador
y a gregoriano; llego a reposar las faltas que tengo
o a necesitar las faltas que no tengo.
Y llego impaciente enmudecido
creyéndome más héroe y menos socio de la libertad,
pulso la sangre que no quise traerme
y que se vino de polizonte, la pulso y está ardiendo,
la necesito fría, calculadora, razonable;
la desinflo, la hiero; me quita el hambre, me destroza,
la acepto, la acojo, le pido que me hable y lo hace.
Creiste venir a solas, a tientas, jugando con la insolencia
de la ingenuidad,sobrado de valor, libre de pasados.
Creiste en el milagro de resistir,
en la curación, porque se trataba de un monasterio,
creíste en todo, también en ti,
olvidaste la sangre, me olvidaste.
Y yo venía contigo en todos tus lugares,
era tu pijama y tu pensamiento
y aquí estoy, más para atenderte que para pisarte.
No seré la sabia consejera que no quieres,
ni tu aliada de locuras, no seré la meta ni la última raya,
ni seré los pies ni la cabeza,
seré el calor, el propósito que te acerque a las pasiones,
el sentido menos lógico, la anarquía
y la rebelión contra lo poco que te queda de cordura.
Yo he venido para obligarte
a linchar tus ganancias del olvido,
a enterrar las ausencias que te matan,
a convencerte de mi importancia.
Soy la parte de ti que más te sobra,
la parte de mi que más te falta.


La sangre que me llama a gritos, esa que me desacomoda,
la culpable del sentimiento, la sangre madre
que me culpa y me destila el amor
para las pócimas de sueños.
Ay sangre, solvéntame este misterio,
déjame calibrar la inteligencia a donde está el error,
a donde está el acierto,
que de una vez a todas quiero tener conciencia
de mi sentido amado
antes que en Yuste me nieve la memoria
que aquí viniste conmigo
y aquí estamos los dos, para esto.




Ramón Llanes. Yuste 31.1.03.

DEFINICIONES



Algo que escribiera para mi amigo José Manuel Rodríguez, sentimiento mío en cuerpo y alma, por siempre.

Yo no soy de esta rueda, compadre, ni de esta envidia; yo no traigo la mano en el bolsillo para negarte mi secreto, he sido esclavo de la espontaneidad y las pasiones; y éstas no te enseñan a ocultar. Yo no soy de esta sangre ni de la prisa ni acaso del reparto de las sobras; soy, eso sí, quien se aprendió a desvivirse y a multiplicar favores en donde quiera que le alzaban la voz o le enseñaran la carencia.
En casa falta de todo y todo rebosa porque el todo solo significa el alcance de la capacidad de cada uno y se inventa lo que se echa de menos; del corazón hacia arriba no es preciso buscar, que a los ojos se encuentra siempre una miaja de esperanza, en la voz un grito, la palabra o un cante, en las manos (aunque parezca que quedan por debajo) el tacto insertado capaz de transmitir sueños y memoria. Y los besos se juntan ahí, corazón en medio para noquear los desencantos. El otro que conoces, compadre, de quien me hablas, no ha dejado huella, no soy yo.
Aquí me tienes, abierto y loco, puños de amistad y necesidad de hombre. Es que te necesito, apostaría largos trechos de vida por ti, aunque en realidad no seas mi compadre y estés con los ojos soñadores que pones a los momentos infinitos, esos que te hacen bajar las gafas hasta las manos y descifrar a la gente con exquisita cordialidad. Tú eres el santo, la seña del sentimiento; yo, amigo, ni una pizca de parecido tengo con lo que me enseñas. Vivimos al lado del puesto, con la balanza inclinada al corazón, con sangre que rebota las espinas, me lo enseñaste. Y también a memorizar los acontecimientos de tu Osma, me enseñaste. Y a entablar afectos, buscando un hilo para encontrar una madeja, me enseñaste. Y la bondad y las cosas que se escapan de los ojos y la pureza de espíritu, me enseñaste.
A veces, cuando soy indolente, me traes una lágrima y cantamos juntos.



Ramón Llanes. 30.01.05.

martes, 24 de junio de 2014

CONTRA EL OLVIDO


DISCAPACITADOS


DISCAPACITADOS


  
 No existen milagros en esta sociedad, tenemos nosotros que solventarnos nuestros problemas y nuestros asuntos. Y así vamos de aquí para allá confiando en nuestras fuerzas, sin esperar que desde las alturas nos saquen las castañas del fuego. Y en el mismo tren, comemos todos juntos, conversamos y nos divertimos. A los discapacitados aún se les exige que se pasen la vida reivindicando posiciones como si esto fuera solo para los  más listos o los más avispados, y no es así. En ese tren están y conviven, románticos, pasotas, locos, apátridas, conformistas y presos. En ese tren a veces, los discapacitados no pueden subir porque no ponen pasamanos, otras no tienen el asiento adecuado, otras les tratan como a seres extraños, y han de andar superando muchas barreras, incomprensiblemente.

         Y si la sociedad la abonamos y la conservamos entre todos, para todos deben ser los adelantos, el progreso, la existencia y la felicidad. Partiendo desde la idea primera que es el nacer hasta la última que es la despedida, desde una acera suficiente a un cine, desde una letrero a un semáforo, desde un coche a un libro. Todo debidamente adaptado, pero ¿desde dónde partimos?, sin duda desde la conciencia, desde el respeto.

         Campañas publicitarias no servirán de mucho, valdrá la conciencia colectiva desde los medios, y desde la individualidad. Y todo para que los discapacitados no tengan que gritar, para que no se vean en la obligatoria necesidad de pedir, ellos son elementos protagonistas de esta sociedad, tan válidos como el más válido, tan inteligentes como el más inteligente.

         Esta es nuestra casa, este es nuestro tren de viaje a todas partes, pues vayamos juntos en la misma onda; cabremos, aún cabemos; dígaselo al vecino, hágalo usted, piénselo; como si se hablara del tiempo o del partido de anoche. Ellos, los discapacitados no necesitan nuestra ayuda ni nuestra tolerancia, necesitan el mismo confort que los demás tenemos, ni más ni menos. ¡Ah¡ ¡y las mismas emociones¡.

Ramón Llanes. Publicado en digitalextremadura.com. 24.6.14

viernes, 20 de junio de 2014

COSAS DE ESTÍO


Cosas de estío

 
20 junio 2014
Ramón Llanes.
 
Dígase partir, perderse, descansar. Tal si el estío estuviera en un contorno ajeno a la ceremonia de la ocupación, tal si no hubiera partida, pérdida o descanso fuera del estío. Sudor que impregna cuerpos y frigorías que lo destierran, largas jornadas para la placidez de las tardes y todo lo que cabe en el verano que siempre es más sabroso. A muchos no les gusta este tiempo a otros les enloquece. Es estío, con la rareza de las noches en vela pidiendo un frescor.
Dígase que el sofoco, a veces, nos supera la capacidad, no surgen inspiraciones nuevas, se acercan los romances que cunden poco; dígase cualquier festejo, festín o boda, amparo en la majestad y benevolencia de esas horas tan prolongadas de sol, un paseo y otro, pisadas en la arena o escondite bajo las acacias, la luz pegando y enrojeciendo y las madrugadas a donde casi nunca llega el completo de los silencios.
Dígase repaso a la asignatura no aprobada del ciclo escolar o de la vida, háblese de ella y de todo entre mesas y salidas, los senderos no descubiertos que se encuentran al golpe de seducción de las mañanas cómplices. Es estío, lo habían dicho antes en los telediarios de la atmósfera, en el cosmos. Dijeron sequía cuando empezaba la cuenta atrás del calendario y está en su efervescencia con poco detalle. También dijeron que el estío prolongaría más el sopor que el agua. A todo se hace el hombre, cuando aquí y allá la marcha no tropieza y arrasa sin tocar el futuro.
Es estío, con poco miedo, con glotonería, con viajes, con amigos. Nos dedicamos la parte de gloria que nos merecemos y nos pertenece, dígase, entonces, festival de sensualidades.

PUBLICADO EN HUELVABUENASNOTICIAS

miércoles, 18 de junio de 2014

EN MEMORIA DE MI AMIGO CARLOS CAÑADA


EN MEMORIA DE MI AMIGO CARLOS CAÑADA


Desconozco quien desordena la vida y quien le pone prisas al dolor; desconozco mis limitaciones para evitar las heridas, el sufrimiento, las lágrimas y los desconsuelos y hasta desconozco cuándo se abren estas puertas amargas de la eternidad. Mi amigo Carlos Cañada con quien he compartido carcajadas y vivencias, dejó de respirar esta noche y se fue con la dignidad que eligen los buenos: despidiéndose de su hijo y quemando su último hálito con una voz serena y honorable.
Todos quienes le hemos conocido lamentaremos esta pérdida porque Carlos era nuestro, y estaba sembrado, desde hace una inmensidad de tiempo, en el jardín de las piedras de la tierra a la que amaba, de su querido Tharsis. Todos somos parte de su sueño de hombre exquisito y de su realidad de ser humano a recordar siempre. Tenía ya los ochenta y nueve pero aún barajaba ilusiones y se aferraba a su alta materia de huesos que le sostenía erguido.
Y aún, con la genialidad de un sabio, cuidaba con la amistad los placeres que le pedían el alma. ¡Qué practicante de las motivaciones, los estímulos y la lealtad!, ¡qué hombre tan especialmente honesto!.
No deja huérfanos solo a sus hijos, deja orfandad en un pueblo entero, en las cortas profundas, en los roquedos, en las tardes de estío y en los ojos tristes de quienes le amamos. ¡Ay, si pudiera saber que le hemos puesto llanto a la noche, por su muerte!, ¡ay, si comprendiera ahora nuestro epitafio eterno de respeto!. Se durmió pero está despierto en nuestra memoria con todo su grandeza. Gracias, amigo Carlos, por haber existido.


Ramón Llanes 18.6.14.

martes, 17 de junio de 2014

SI YO FUERA REY

  • Si yo fuera rey

    Las pocas ilusiones que albergara para llegar a ser rey se me han disipado hace unos días vista la elección de Felipe para el cargo, en ese entramado prosaico tan aceptado y tan rechazado por los propios poseedores del poder que no somos otros que quienes nos merendamos el pastel sin apenas enterarnos de nuestra propia realidad. Sin importarme en exceso el acierto de la elección, hice mis cábalas, -tiempo atrás-, por si un acaso se me concediera la imposible misión de reinar en un país donde me siento más ciudadano que regidor. Reinar en casa y en mi vida es más complicado porque te creas una dependencia obsesiva, corresponde enseñar a los niños a jugar, enseñar las reglas, abrir la conciencia, compartir los niveles egregios de la tolerancia y practicar soberanamente el amor entre todos los miembros de la familia. Reinar en vida propia es más delicado aunque más honroso.
    Corona
    Y pensar a quiénes elegiría como compañeros en la tarea de reinar un país no me supondría un problema serio porque me llevaría a las cortes del reino a los pequeños que se entretienen en ternuras y a los grandes que saben de venencia y soledades, fácil.
    Como proyecto de futuro podría valer; aquello de la presencia dinástica en la historia, las relaciones internacionales o la importancia de llevar una corona con toda la dignidad, ciertamente engancha. Pero la imposibilidad de establecer contactos de afecto con quien te apetezca, la esclavitud a la institución monárquica, la mirada siempre puesta en el mandato de los dirigentes, la acción de poder siempre dirigida sin un atisbo de rebeldía, la incomodidad de pertenecer a una casta alabada por unos y desahuciada por otros, una lata.
    Seguir reinando en lo propio de cada uno con las zapatillas a mano, la bata de los sábados por la tarde, la libertad de elegir compañeros de viaje, las mañanas de artesanía de la madera,los ratos de música, los placeres a pie de foros temáticos con la amistad siempre de por medio, la franqueza en todo aquello que se haya de decir, (sin tener que vivir en ocultismo), los ojos siempre cercanos a la sensación que produce el horizonte más emocionante, la complicidad tácita en el respeto, la insolencia de poder seguir escribiendo poemas de amor e incluso el entusiasmo de mantener la fragancia de la unión con los míos; ni por todo el oro el mundo renunciaría a este deber tan sencillo, ameno y apasionante de reinar, con todos, en la armonía de mi casa y de mi vida.
    Ramón Llanes

    miércoles, 11 de junio de 2014

    INDICADORES DE RESPETO

    Indicadores de respeto

     
     
                           
    Yo sé de estas cosas lo justo. Incapaz de escribir un tratado y ni acaso un artículo de opinión que refleje la parte de intención que me empuja a este desliz de expresión sin intento alguno de convencer. Pero ando, y el andar levanta polvo, y el polvo provoca hilaridad o sofoco y después de andar, de observar al polvo en sus muchas dimensiones y de comprobar que la hilaridad y el sofoco no conjugan con sosiego -o algo parecido-, después de todo eso y lo que se olvida, se me meten como huellas las grescas intencionadas que hacen quebrar las aristas del societario privilegiado que vivo y entiendo que, a todos, nos distingue.
    Las manías por la descalificación de los seres que más miramos a través de los medios se ha convertido en honorable manera de mostrar disconformidad con sus formas y la asamblea de los curtidores de faltas de respeto ha minado el escenario. Se ha creado un tratado de chistología burlesca que se utiliza con descaro ante cualquiera que tenga cuota de pantalla superior a la normal. Los políticos y la corona, los presidentes de los bancos tales y los concejales de cualquier causa, congregan la casi totalidad de los verbos insidiosos y la maledicencia que se descarga en ellos como premio a sus desvergüenzas, quizá; presumo. La institución de la libertad de expresión domina a la otra no menos constitucional y natural institución del respeto. Es permisible insultar al político, es adecuado burlarse del rey, porque ni uno ni otro nos merece el mínimo respeto que somos capaces de conceder a otros gremios, sectores o colectivos. Nadie, nadie se atreve a condenar actitudes de una determinada persona ajena a lo público; en la cultura cotidiana no son frecuentes los abusos ni las faltas de respeto entre cada uno de los habitantes, ni son bien vistas las chanzas entre individuos o entre grupos, digamos cofradías, asociaciones, colectivos de ciclistas, de actores, gremios de fontaneros, etc. La metedura para con los políticos o la corona son simpáticas y causan risas de tabernas.
    Como no sé mucho de esto ni siquiera se me ocurre la solución pero abogaría por el respeto a todos, quienes sean -políticos o reyes, ricos o vanidosos, capitalistas o alcaldes- a todos; ya sean de la forma de gobierno contraria, del emblema contrario o de la bandera de otros colores; abogaría más por la buena compostura que por la descalificación aunque los destinatarios no se lo merezcan. Podría ser también un matiz para seguir creando escenario social mejor, intuyo.

    PUBLICADO EN DIARIODEHUELVA.COM

    jueves, 5 de junio de 2014

    PASARON OTRAS COSAS

    Ramón Llanes
    Jueves, 5 junio 2014

    PASARON OTRAS COSAS

     
    A la mitad del día se acabaron las noticias, justo cuando la entera vecindad supo de la abdicación del rey. A partir de entonces los teletipos se olvidaron de nosotros y cubrieron con tinta azul todo el papel corriente que se destinaba, como a diario, a los sucesos que afectaban a débiles y que a veces contaban la voracidad de la fanfarria de los practicantes de tan licuada violencia, y todo para crear continuos desméritos de grupos sospechosos que nada deben pintar en una sociedad de “librepensadores” de la rancia derecha, propietaria del poder, de dios y de la verdad.
     
             Y no contaron las historias de quienes se fueron para dejar de existir por la culpa cierta del descuido general del protector de vidas; y no contaron los tiempos que esperan los muertos en las listas de espera de los hospitales inhumanos que se cierran solo al contacto del enfermo, como si estos apestaran y saltaran las alarmas del sistema e impidieran la entrada; y no contaron las cifras del hambre que aumentaron ayer y aumentarán mañana; y no hubo papel ni tinta roja para escribir de los solidarios que se juegan el alma porque la entregan en cada misión.
     
             Sucedieron ayer otras cosas que nadie se atrevió a contar porque al rey se le ocurriera solicitar su derecho a jubilarse y eso sonó a importancia y nadie pondrá en duda que quizá lo fuera pero quizá no para dedicarle las 120 páginas de cada periódico o para prestarle tanta atención que se olvidara, en esa instancia mayor de la cocina nacional (donde se aplauden las miserias de los otros), de la obligación de seguir gobernando con idéntica funcionalidad y eficacia como si nada hubiera pasado, continuar cuidando al enfermo país que de UCI en UCI desespera.
     
             Las sorpresas son calamidad habitual en el ejercicio doméstico nuestro de marear mil veces la perdiz para sostener el caldo en la olla, sin derramar una gota. Los optimistas soñarán con un mañana distinto, los ilusos creerán que no amaneció y la  pura realidad se volverá para desafiar a los culpables del “por qué esto no va mejor cada día y siempre nos toca el perder a los mismos”.
     
    DIGITALEXTREMADURA.COM

    miércoles, 4 de junio de 2014

    HABITANTES DE LA MARISMA


    Habitantes de la marisma

    Sin excepción, los movimientos que surten de vida a la marisma son todos creados bajo el fango gremial del agua, con la viveza de los contraluces y la complejidad de los esteros; un mundo inaccesible, inquieto, exuberante y rico en vida. Las aves, los peces, los gusanos del fondo, la flora adjunta al humedal, la salubridad penetrante, los vicios del ámbito en toda la armonía esplendorosa, imposible de ser observada en su plenitud.
    El Rocío (García Marquina)
    Despacio, entre calma y calma, el vigor de la naturaleza va imprimiendo cualidad y desenfado a los habitantes privilegiados que inundan de belleza el paso de los tiempos. Sin embargo su libertad consiste en su predisposición constante a la supervivencia, sin un descuido que aparte del médano la ilusión por conservar la vida. Algo así como los animales de tierra adentro, como los humanos, que simplifican los fines a la tenencia del aire y se autoestiman para la consecución del libre pensamiento desde la libertad que sueñan. Los humanos aparentan la mayor osadía del aguacero, de la insistencia; los pájaros vuelan haciendo cálculos, al mismo tiempo; los humanos hacen los cálculos antes de andar y se visten de soldados y de vulgaridad y de miedo y despiertan la pollería del nidal de la marisma y asustan aliados de paraíso hasta pretender aniquilarlos.
    La tarde ha tornado en rojo su azul primigenio y los pececillos de la más cercana charca se trinchan de sosiego debajo de las algas protectoras; los flamencos se cuentan aventuras y buscan alimentos. La vida se va poniendo oscura desde el cielo y cada cual buscará el cobijo ideal para la dormida, como la luz, como la tierra misma. En tal simbiosis no participan los humanos, no les está permitido.
    Qué invento más excitante circunda, a modo de esteros, la paz de los hombres de esta parte de tierra tan generosa. Qué paisaje tan único nos custodia.
    Ramón Llanes.
    Publicado en huelvahoy.com