RAMÓN LLANES

BLOG DE ARTE Y LITERATURA

miércoles, 13 de agosto de 2025

DEL CALOR Y OTRAS OBVIEDADES

 DEL CALOR Y OTRAS OBVIEDADES

Sin entrar en debates de última hora o someternos a la encuesta de una determinada red social y acaso sin saturarnos de las conclusiones más nimias, entrar en un ascensor y hablar del calor asegura el entretenimiento durante el trayecto y anima también a una conformidad en tono aquiescente de cualquier conversante. Es obvio que estamos en una época que propicia una temperatura alta y a nadie se le ocurre comenzar a romper ese cálido silencio indicando “uff, cuándo vendrá el calor del verano”, porque de inmediato obtendrá un rechazo general, aunque algunos por complacer son capaces hasta decir que la gente se queja por vicio o que “no es para tanto”.
El verano, en esta ocasión, ha puesto al calor de moda como en los viejos tiempos; ni tormentillas ni ventoleras ni mañanas con niebla, solo calor y calor apretando a destajo y despertando las ganas de salidas y de festejos; todo el personal con las ilusiones puestas en el disfrute y el relax, que hasta el empleo ha venido a quedarse al sofoco de esta ola ardiente para animar la multitud de pasiones dormidas por estos andurriales tan esquivos a la abundancia.
Donde se ponga un amanecer de estos, de este estío profundo y benigno, nunca un invierno tosco y cerrado, nunca la sombra, aunque contradigamos a quienes aman la naturaleza por su actividad. Pues debe entenderse que la fluidez del tiempo calmo es también naturaleza viva o eso nos parece.
Ramón Llanes

EN ESTADO PERMANENTE DE CABREO

 EN ESTADO PERMANENTE DE CABREO

Esto sigue tan mal como para no morderse la lengua: los osados políticos cursan sus estudios en demagogias y corrupciones, la judicatura al servicio de la casta para aprehenderles de los privilegios sin lograrlo, la luz dejando de estar en los cabezales de los más necesitados, los medicamentos faltando en las recetas de los enfermos, las hipotecas mordiendo cada mes más que el hambre, los bancos obteniendo beneficios del mal ajeno, los golfos anclando sus premisas en las estaciones más lujosas, las mujeres de los poderosos con sus trajes de piel de billetera robada restregando al diestro y siniestro de la ironía los insultos más soeces, los votos calentando sus mangas para perdonar a toda la chusma, los votos intentando enmendar los currículos de los ineptos, los basureros llenándose de ojos, los ojos llenándose de basureros, la vida consiguiendo ser cada día más incómoda de llevar, todos los habitantes de esta quejumbrosa tristeza sobreviviendo en un estado permanente de cabreo.
Ha llegado el agua más arriba del cuello para quienes protagonizan las escenas menos vistosas de esta obra rota y manipulada por mercachifles del desorden y la ignominia, o será que alguien finge una libertad suficiente, ríe, se mofa, se olvida o maldice a cuanto maldito pone su grito en los oídos de dios, o será que nos hemos vuelto locos en un masoquismo colectivo y aguantamos el maltrato como mal menor a nuestro despiadado destino. O será que rozamos colectivamente la tontura.
Ramón Llanes

martes, 12 de agosto de 2025

POR QUÉ NO SOY EL HOMBRE MÁS RICO DEL MUNDO

 POR QUÉ NO SOY EL HOMBRE MÁS RICO DEL MUNDO

Por mala suerte no soy el hombre más rico del mundo, lo he intentado un millón de veces con la carrera, con la guitarra, con la poesía, con los chistes, con las amistades, con los los cupones, con la lotería y con el amor; no lo he conseguido y al final he acabado siendo el hombre que más veces lo deseó. Y vengo a enterarme que el más rico se hizo vendiendo calcetines, incluso si se me hubiera ocurrido ahora sería el hombre con el almacén de calcetines no vendidos más grande del mundo. ¡Cuando se está de mala racha todo sale al revés!.
Ramón Llanes

LA ÚLTIMA NOCHE QUE PASÉ CONTIGO

 LA ÚLTIMA NOCHE QUE PASÉ CONTIGO

No ha llegado aún el tiempo que me invente
la oronda maldición de tu partida,
hay deberes de amor que están pendientes
en las dulces esperanzas de mi vida,
no ha llegado a llover, aún no llueve
ni pían con piedad las golondrinas,
no ha llegado aún el tiempo de perderte,
no han abierto sus sombras las cortinas
para oírte salir sin desprenderte
del dolor que me dejan tus huidas.
La última noche que pasé contigo
nunca tuvo razón de despedida.
Ramón Llanes.

INFIELES

 INFIELES

Tomás pensó que podía ser infiel a su capricho porque sus amigos no lo eran y a él le seducía mucho la idea de ir al contrario que sus amigos por la vida; pero Tomás también perseguía la perfección y procuraba dotar a su fe de una consistencia suficiente como para no desfallecer en los principios inculcados de devoción a todos los habitantes del cielo, era creyente hasta la médula, rezaba a destajo, proclamaba la omnipotencia de su dios creador y andaba por el mundo haciendo el bien como quien respira y por todas esas cosas era muy considerado en su sociedad.
Pero Tomás se hizo infiel consigo mismo al buscarse los adentros de sus partes más íntimas y pecar desaforadamente contra los mandatos de los credos que defendía. Y bien que sabía de su historia pecaminosa de cada tarde que a la hora de la siesta jugueteaba con su cuerpo y sentía el placer natural prohibido. Y nunca supo descubrir este secreto en el confesionario, llevándose una media vida sintiéndose un maldito por estar destinado al fuego eterno.
Murió Tomás un día de abril y fue recibido en el paraíso celeste donde encontró a compañeros de la tierra que siendo incluso más pecadores que él habían alcanzado el premio de la gloria de dios; quedó extrañado por no considerarse merecedor de tal privilegio. No se hizo a la idea hasta que en una de las terapias con ángeles custodios y personal del montón en los suburbios del mundo pasado, el jefe advirtió que los juegos eróticos consigo mismo nunca fueron mal vistos en las alturas ni fue considerado acto pecaminoso, incluso ni siquiera la infidelidad carnal con personas distintas a quien se estuviera comprometido. Esas teorías son consideraciones terrenales impuestas por el derecho civil de los humanos que no tienen vigencia en el cielo donde solo se aplican las leyes divinas -dijo el Director General de la Curia de dios-.
Y Tomás se arrepintió de haberse muerto.
Ramón Llanes.

lunes, 11 de agosto de 2025

LA DUDA DE CARMEN

 LA DUDA DE CARMEN

Carmen ha crecido, se hizo mayor sin notarlo más que al tener que comprar cada poco tiempo tallas más grandes de sujetador, solo en eso percibía el alargamiento de sus huesos y la exuberancia de sus senos, sus hermosos senos tersos, suaves y erectos, quizá envidia de las otras mujeres de su edad. Carmen sigue creciendo más y más, es alta, corpulenta, amable, soñadora y febril; crece y a la vez piensa en el amor como cualquier chica, su único pensamiento es besar a alguien, abrazar al chico de la panadería, al cartero o al mecánico pero ellos andan con las miradas en otros monumentos.
Carmen ha crecido tanto que ya tiene cuarenta y dos años y aún no se ha visto en asuntos de enamoramientos ni eróticos ni siquiera ha recibido propuesta mínima para una cita, una seducción o un entretenimiento fugaz; no ha padecido síntomas que le hayan advertido su cambio hormonal por un acontecimiento, no sabe qué se siente, cómo son las consecuencias, qué debe hacer, porque ayer en su paseo vespertino después del trabajo en la Biblioteca un señor con gafas se le acercó, le pidió su número de teléfono y su Instagram, le invitó a un café con sacarina y le sonrió cálidamente como si quisiera cortejarla de la forma más antigua; y ella, al volver a casa con un semblante nuevo sintió un especial hormigueo en el estómago y pensó que esto podría ser enamoramiento pero tiene sus dudas porque jamás lo había experimentado pero esta noche no ha podido dormir acordándose del señor de gafas que le invitó por la tarde a un café con sacarina.
Ramón Llanes

LA PAZ EMPIEZA NUNCA

 LA PAZ EMPIEZA NUNCA

Ni mañana podrá
ni los restos de dioses reunidos
ni la más inhóspita creencia,
empezará la paz
cuando tú la ambiciones
y los tuyos la busquen,
cuando sea hecha en la calle
y moldeada en el salón,
empezará la paz conmigo de loco,
contigo de poeta,
con nosotros de buscadores,
con ellos de libres,
será nuestra entonces sin llamarla
o se perderá en una lágrima
con baba en los labios.
Ramón Llanes.

LA PAZ CERCA DEL AGUA

 LA PAZ CERCA DEL AGUA

Yo no soy quién para exigir la Paz,
no me han hecho responsable de los números,
pertenezco a las trincheras que se mueren de hambre,
a los pájaros que se ahogan con el agua al cuello
y a los alimentos podridos del mercado.
Mi voz no se oye en las antenas
ni suena en las campanas de la media noche,
mis padres murieron con énfasis en la conciencia
habiendo sido delicadamente humanos,
ya no me queda otro remedio
que volver a la mar, como hoy,
y restregarle a la espuma mis dolencias,
regresar luego a casa con las manos mojadas
de compromiso y seguir soñando
con un mundo mejor
pero no soy quién para exigir la Paz.
Ramón Llanes

domingo, 10 de agosto de 2025

HABLANDO DEL VINO


Compartido con: Público
HABLANDO DEL VINO
No le digan al lagar
que de puertas afuera se pone de moda el vino,
que allá los siglos son contemplados desde la madre,
la raíz por donde empieza a sernos culpa de hedonismo,
el viñedo extendido abrazando siempre la tierra
y dejándose abrazar
como son los amores que se rinden reliquia y memoria.
Vivo para nacer, crecer, multiplicarse y morir;
vivo para la ceremonia y para el testamento,
vivo para el brindis y para la espera,
vivo para el primer compromiso
y para la última noche.
Mientras el aire huela a vino
será tiempo decente,
no malgastará el espacio las nostalgias ni los sentidos,
tiempo de bonanza, con bienestar de empuje,
que de las duelas surge ensamblado y noble.
Vino, como alimento y placer,
para saborear en él la bota, el lagar, la tierra;
para sacar de él la ubre, el color, el paladar.
Mientras los hombres se desentrañen
mimando la cepa, será tiempo de acopio y acercamiento,
será regla de calma, efemérides cotidiana
no más lejana de la mesa, la candela, el plato, la familia y los hechos.
Cuando casi no se precisa otro consuelo,
que ya está en las paredes.
Mientras sea hablar
de vivir con el vino, de nacerlo, de dedicarle la jornada del sol,
la espera hasta la cosecha,
de probarlo, de amarlo,
será tiempo de liturgia de bienvenida.
Se hizo tal vez pálido aquí
y tinto en otro predio,
para distinguir solo los sabores
y nunca la paz de su probanza.
Ramón Llanes.




LA CALLE

 LA CALLE

La calle posee ese encanto de libertad que no conceden las paredes ni las ventanas, la calle conduce a todos los caminos, está envuelta en tránsitos y calmas, se hace cada mañana, se respira sola, se amedrenta de los que la requieren sin respeto y se fuga del ámbito como una mariposa que se esconde en su nada efímero. Consumir la calle es crecer en sensualidades, es aprender a estar despiertos el trecho largo de la convivencia, es pasear por los ojos de las gentes y entretenerse en la jerarquía de una ansiedad dispuesta al impulso o la espontaneidad; se fraguan en la calle los avisperos del negocio de entenderse y se enfunda cada cual su delirio por haberla pertenecido y haberla obtenido plena de sustancia en tan solo un reguero de andares por la placidez de estos ígneos columpios de estancia que son por extensión la grandeza de la calle.
Una melodía especial tiene la calle, el sonido huele, el olor es música, el color se extiende a los pasos que damos, nos persigue, nos ilustra, nos embelesa.
El vestido de la calle aparece como la sombra del paseante y está en la prisa y en la conversación, se desacelera o se hace bulla hasta obtener esa escondida verdad que quizá se deslice por los zapatos o las prendas y advierta a todos del vicio de teatralidad que la define. Es la calle un versátil escenario, tiene sus códigos éticos creados en su aire, escritos en su compleja identidad que a la vez sirven de soporte a la idiosincrasia de su ciudad o pueblo.
La calle hace que los vocablos, los gestos, las formas e incluso los sentimientos de un núcleo
sean parecidos en su contexto. Los seres que habitan la frecuencia de la calle se parecen en el habla y en las ilusiones, se corresponden en el trato y se estimulan por moldes similares.
Acaso la calle sea el alma de la vida.
Rllanes

sábado, 9 de agosto de 2025

HAMBRE

 HAMBRE

Son días de hambre,
nos pasan por los ojos como castigos
anunciando un mañana peor,
en peligro de extinción la costumbre de comer sueños
letras, risas, derechos,
en peligro la vida, la decencia, la locura.
Acaba el día y sigue la dolencia
en las últimas caries de la utopía perdida,
se acercan los buitres a comernos más,
vienen hoy los santos para advertirnos
de la muerte, no significamos un bledo
en la escala del afecto
de quienes ordenan repartir las justicias
de cada tarde.
Solo tu armonía, amor, me cuida la estima.
Ramón Llanes



NOSOTROS Y EL MAR

 NOSOTROS Y EL MAR

 

                Qué habrá sido de la última ola, de su último refugio en la orilla quieta; qué de los pájaros que le bucearon alimentos y se durmieron en el aire esperando los vórtices y las algas. El mar simula momento a momento que nos olvida y permanece en una atención insistente, se asombra de las insolencias nuestras, anega la tierra cuando le viene en gana, se quita el humedal y la caspa, se intenta disolver en minúsculas gotas para ofrecernos su mejor patria; la levedad de nuestra mirada le hace añicos los recuerdos, habrá pensado que somos los gigantes que lo mueven y que nos debe sumisión.

                Está el mar en nuestro lado izquierdo, observándonos, calentándonos los inviernos fríos, está sobrado de benevolencia y sin cansancio. Tenerle cerca es un colirio para el estado sensorial de nuestras células. No se irá, le ataron las manos, le prensaron los pies a nosotros, le llenaron de gérmenes de vida; ni sabemos cuál será su fracaso ni conocemos sus metas, que a solo de un sorbo, en la puerta de nuestro hálito, para el deleite estival, para cuando la nostalgia nos alisa, para todo, el mar está a la espera. Qué espuma habrá inventado para hoy de toda su gama de creaciones o qué magma espiritual tendrá en las manos grandes para nosotros; lascivia natural y anhelos echados, músicas de la Pampa, aires del Sur, traerá al ocaso para la oferta ritual de los días céfiros. Tenemos la suerte de tenerle, nosotros que somos ficción en su mundo y le golpeamos la cara cuando nos responde.

                Ayer le amó la calma, en las levas fue mensaje de afecto que envió a las playas; ayer las cosas del tiempo le dejaron vivir y los hábitos de los días le dedicaron cantos de bienvenida, como si se hubiera ido un rato y viniera, ayer, a confiarnos un nuevo paisaje. El mar, ¿no parece una especie de nosotros, a veces hostigado, a veces tierno y siempre en la esperanza?. O acaso un referente. El mar, tal vez la incógnita emoción.

 

                Ramón Llanes. 

viernes, 8 de agosto de 2025

AMO A MI TIERRA

 AMO A MI TIERRA

Amo la tierra de los solitarios y los necios,
de la prolongación de los “sin banderas” y los insulsos,
la tierra del resabio y la templanza,
amo a los cordeles del tendedero
tanto como a la indolencia de las pizarras,
amo a los médicos sin fonendo
y a las enfermeras sin jeringuillas,
comprendo la utopía del verdugo
y reciclo cada tarde la lista de los sin techo
por si acaso quedara uno menos que contar,
me hago de alpargata y junco,
canto en el desierto de mis sordos amados
y oigo la voz de la taberna,
me invento una llovizna al mediodía
para salir a la calle ancha que mis compadres andaluces
pisan con fervor y ética, amo a los pueblos,
a este pueblo y al otro y al otro,
me lucro con la soledad, se me escapa el agua,
admiro a los pobres, me alimento en el chubasco,
estoy cumpliendo mi sueño de parecer
cada semana un centímetro más andaluz
y reservo la parte de patria que me toca
para enseñarla con altivez
a quienes se me fueron de las manos
con el exilio económico en los huesos
y continúan amándola.
Ramón Llanes

FRÁGIL POEMA

 FRÁGIL POEMA

Cualquiera es soldado
con licencia para olvidar,
cualquiera cree tener el don
de ganar. Y así, nadie es perdedor,
nadie aprende las reglas de la ética,
la disciplina del afecto.
Ha desaparecido
el privilegio de la conciencia,
esta selva se seca de amapolas,
preside el ambiente un tufo
a tanque oxidado y a penal.
Los animales reproducen vida
en Ítaca, las plantas en Jíbaro.
Se han llevado el oro de Tharsis
a las colmenas de avaros de Troya,
es el espacio un cenagal de indiferencias
donde domina un pirata
que rompe las estrellas con el garfio
y quita luz a los astros. Isla Negra
se ha quedado indispuesta
en la crecida del verso.
Autorizaron a cualquiera
para mandar con licencia,
para quemar almanaques, borrar músicas,
encarcelar el aire, envenenar el agua
y mutilar todos los poemas.
Ramón Llanes
(del poemario MEMORIA DEL PRÓDIGO)

jueves, 7 de agosto de 2025

MIRARNOS SIN IRA

 MIRARNOS SIN IRA
 
Somos distintos en la jerga y en el tono,
parecidos en la sabiduría
iguales en la bondad
y ambos, siempre, alimentados
por las mismas ubres
de filones de oro y tiempo.
Ninguno de nosotros precedemos
en constancia y hemos tenido la suerte
de avanzar juntos en los desafíos,
allá tú en tu ámbito místico,
acá yo en el crisol del tajo,
ambos soñadores a su modo, ambos tercos
en la rebeldía.
Ocupamos la minúscula línea comprometida
de la tierra que nos clava en el sitio elegido,
hemos llegado hasta aquí a través del ocaso
y  aquí seguimos a base de sentimientos.
Crecimos gemelos al calor de la tierra
para entender mirarnos sin ira.
 
Ramón Llanes. 

QUÉ SERÁ MEJOR

 QUÉ SERÁ MEJOR

Adorables aquellos tiempos que nos permitieron solucionar los asuntos de estado y de casa en las tabernas; ya no es así, acaso dada la muy convulsa sociedad o despreciados en la actualidad los consejos que de tales foros surgieran. Quizá cualquier tiempo pasado no fuera mejor o quizá la inercia de esta difícil existencia se encamine a ir complicando poco a poco las cosas y nunca se atajen los problemas desde el primigenio instante de su nacimiento o quizá incluso que haya mermado la capacidad resolutiva de los seres que de ello se encargan.
De cada ciclo se despotrica a la merced del despotricante, siempre amparado en las libertades de expresión que tan bien provistas de normas se presentan para aportar con ello una colaboración positiva. Aún existen expresiones que ni las leyes saben dónde meterlas, si en la libertad de expresión o en la falta de respeto a los demás; un galimatías más a la pronunciada inexactitud de la verdad. Ahora ni se sabe qué pensar ni qué elegir ni siquiera qué comprar; la incertidumbre es la premisa más en boga que es capaz de ahogar todos los proyectos o eludir todas las responsabilidades. Es imposible conocer el cuadrilátero completo para abarcarlo, descifrarlo o protegerlo, tal como ocurre con las ideas. Y todos aquellos malvados sistemas que en el antaño predominaran en las prácticas del poder como fascismo, dictadura, imperialismo, anarquía u oligarquía, se resumen, con todos sus vicios, en esta democracia parlamentaria que a bien ha tenido absorberlos y hacerlos propios a pesar de no encontrarles emparejamiento de color y espacio con la evolución ideológica actual. Los teoristas y rigoristas que analizan estas incidencias se asustan, no acaban de entender las mezclas de sistemas que se están produciendo y advierten de sus nefastas consecuencias. Como si no hubiéramos avanzado; las intransigencias en el deber de la gestión han propiciado la aparición de las reprochables formas para convivir un estado que ya estaban presumiblemente superadas. Y muchos aún desprecian a los individuos y grupos antisistemas, como si de tal origen proviniera el daño.
Ramón Llanes

PERDER EL TIEMPO

 PERDER EL TIEMPO

En un alarde de ufano antiguo quise probar a perder el tiempo y me invadió de inmediato una destemplanza vergonzosa que me hacía culpable inanimado de las paradas del mundo, todo lo ligero se me vino con bulla al pensamiento queriendo impedir mi deseo; me hice el sordo, el insensible y el loco y me enfrasqué en la pérdida de mi tiempo sentándome a la oscura sombra de una pared enhiesta a contemplar los módulos de unas aguas tranquilas que se movían sin motivo en la vigilia de la mañana; permanecieron en blanco mis elucubraciones humanas hasta que en un rato sin minutos se me quedaron dormidas las piernas y hube de despertarlas con un andar pausado por la orilla meneando sin ritmo una penca de jara y mirando con imperfección al suelo; seguí absorto en nada, libre de libertad y lleno de silencios, no caí en la cuenta del sopor, de los pájaros ni del aire, no me busqué en las piedras ni me hice examen de conciencia ni voluntad de rebelarme contra la calma; no me imaginé cómo sería una tarde sin verso o un caballo sin relincho, no supe buscar arañas, trepar al aromo cercano ni delimitarme en los gustos; sé que me pareció de pronto el final de la experiencia creyendo que el tiempo me llamaba para otros rituales y miré de reojo el reloj sintiéndome satisfecho de haber desperdiciado toda la jornada en vagas contemplaciones cuando observé que solo habían transcurrido 30 segundos y me enfadé conmigo por no tener ni idea de cómo perder el tiempo.
Ramón Llanes

miércoles, 6 de agosto de 2025

AMIGO MUNDO

 AMIGO MUNDO

Amigo mundo
te cambio tu fusil por estos versos,
te cambio tu almanaque de terror
por la ternura de cualquiera de mis besos,
te cambio tu metralla y tu valor
por una tarde de lluvia en la ventana de mi pueblo,
te cambio el malestar de tu misión
por la paz que se cuida en mi respeto.
Amigo mundo,
te cambio tus bombas de combate, tu camión,
tu uniforme, tu trinchera, tu bastón,
por la concordia cálida de mis credos,
te cambio todo el hambre de tu sinrazón
por un rato de música, por un silencio,
por una melodía en do menor
que cantamos todos aquí al estar contentos,
te cambio tu himno por mi canción
o tu escopeta de matar por mi cuaderno
donde escribo de mi y de los nuestros,
te cambio tu odio y tu aspecto de invasor
por la mejor historia de los hombres buenos,
te cambio tu discordia por mi pasión
y tus guerras te cambio por mi afecto,
te cambio las desigualdades, te cambio tu decisión
de proteger menos a los más honestos,
de descuidar tanto al corazón,
de fomentar la miseria, de desterrar lo cierto,
de consentir a capricho que el error
sea la bandera más insultante de este tiempo.
Ramón Llanes.

DOS MUNDOS

 DOS MUNDOS

La política es el arte de la disgregación. Es la ideología la marca indiciaria de los desafíos que recalan en la división de clases con la finalidad de obtener la más cualificada cuota de aceptación en el ejercicio de cualquier nota de mando. La política es la “ciencia” capaz de crear, inventar o diseñar dos mundos distintos con la única capacidad del pensamiento, sin necesidad de prácticas de laboratorio ni investigaciones atareadas e interminables, solo es preciso un elemento: la estrategia; desgarbada, viciada, tóxica, sin aperos de ética, pero estrategia, como mala arte para poder seccionar a los seres humanos según la conveniencia, previa tarea de recaudación de gestos y gustos exactamente iguales a los plasmados en las consignas del líder.
Así, con esta tela, el movimiento político actual de nuestro país, ha formado dos mundos que responden a fines iguales pero con anatomías desiguales porque el mínimo parecido que pudiera existir entre ellos facilitaría el rechazo de los adeptos. La política está ordenada en este parámetro de la disgregación y el separatismo; los mundos deben ejercer su posicionamiento con la regla del alejamiento, a ser posible odio, a ser posible venganza.
Desde la óptica del ciudadano medio que nace, crece, se reproduce y muere, estas finalidades no aseguran un ejercicio mejor del poder porque las premisas de los partidos tienen sus venenos en las leyes y pueblan de deshonra hasta el parecer de los excluidos. El humano superviviente formula sus cuestiones en su propia soledad porque no gusta ni participa de las grescas parlamentarias y se siente un dios menor en esta andadura que mucho se parece a una batalla constante contra la incoherencia. Y estos ciudadanos, -una vez en esos mundos-, separados, inútiles, a contracorriente, se envenenan con la savia machacona que está latente en cada mensaje político y él acaba por ejercer sus devaneos con estas miserias, mirando a ninguna parte y aprendiendo a ser crítico inmisericorde, tirano y malvado con quien no se viste con el traje de su ideología. Y quedan dos mundos irreconciliables incluso para cumplir los mandatos constitucionales que con gran boato juraron.
Ramón Llanes

martes, 5 de agosto de 2025

OTRA VEZ

 OTRA VEZ

Pequemos otra vez,
rompiendo la farola del campo,
esa bandeja grande que, en forma de plata aseada,
se mueve colgada
por los llanos y los esmeriles,
se aniña, se empobrece, se disloca.
Luna se llama también
tu pensamiento.
Ramón Llanes. (de MEMORIA DEL PRÓDIGO)

GENTE LINDA

 GENTE LINDA

A un aventurero que recorrió el mundo de manera casi precaria le preguntaron qué paisaje le sorprendió más y cuál fue la mayor de las emociones sentidas. Las gentes son lo mejor del mundo –dijo-. Y luego añadió las ayudas recibidas, las sensaciones compartidas, las sonrisas de los menos favorecidos. No encontró caníbales, gentes de mal, perniciosos, malvados, miserables; encontró amabilidad, humanidad, afecto.
El mundo del aventurero es más extenso y amplio, nosotros discurrimos en un entorno pequeño y conocido, las personas que nos cruzamos pertenecen a nuestro magma de vida, somos los mismos seres con distintas casas pero ¡cuánta gente linda tiene nuestro pequeño mundo!, ¡cuánta mujer entregada, cuánto hombre incansable, cuánto niño alegre!. Bien pensado y bien valorado, el ser humano de nuestra cercanía es el más excelente patrimonio del que podemos gozar. El don preciado que complementa nuestra dignidad; ¡qué hacer sin él!.
Los pueblos están repletos de complicidades, siempre existe alguien para consolar un desencanto, otro alguien para comprender un dolor, otro alguien para un aliento. La conciencia de estos seres imprescindibles no tiene parámetros ni niveles de exactitud, actúa con el impulso de los sentimientos y acude a una llamada no escrita de la ética. La gente linda mantiene el paisaje y consolida el amor.
La parte más íntima de nuestra individualidad se alimenta –puede parecer- de autoestímulos personales pero siempre precisa de un empuje común que solo la colectividad aporta. Y la predisposición del ser como único y como colectivo es suficiente para diseñar, consolidar y restaurar todo lo que concierne al universo de las emociones y cumple a la perfección su función solidaria y reparadora. Gente linda.
Ramón Llanes

lunes, 4 de agosto de 2025

SE EQUIVOCÓ LA TARDE

 SE EQUIVOCÓ LA TARDE

Debió ser que se equivocara la tarde por hacer coincidir una Manifestación poética Pro Palestina con una corrida de toros, debió ser eso, porque de lo contrario cómo podría entenderse que a una asistieran ciento ocho personas y a la otra más de dos mil; debió ser que la tarde no supo calibrar las consecuencias porque no trajo a los versos a quienes gustaron de asistir al coso de otra muerte; debió ser un error de la tarde que no asistió ella toda entera a la calle donde un grupo de poetas, pintores, músicos, camareros y locos lloraron por detener un genocidio concediendo más importancia a lo más incívico de la sociedad. Fuere lo que fuere se equivocó la tarde y se desentendió la vida.
Ramón Llanes. 5.8.25

CONSIDERACIONES PARA DESPUÉS DE LA DERROTA

 CONSIDERACIONES PARA DESPUÉS DE LA DERROTA

 

 

         Cuando se nos haya consumido esta idiotez de tedio, malhumor y podredumbre , nos vendrá del interior un insano hedor a impotencia y una luctuosa sensación de no haber deseado vivir, que minará durante muchas de nuestras singladuras la valentía y los pulsos. Cuando seamos célibes de esta subversión canalla y maldecida se nos habrán podrido las esperanzas y habremos olvidado conjugar los verbos de futuro.

         La derrota ya está hecha, está forjada en mantos desiguales de dolor que sin darnos cuenta ha sometido al miedo fatuo todas nuestras gloriosas utopías por las que habíamos perdido tantos sueños; la derrota es un tumulto de miserias venidas a más y acumuladas en nuestro organismo como virus contagioso que apenas deja respirar lo sucinto y apenas impide atarearse en esperar lo que buenamente llegue. Y es preciso preparar una custodia de lo que nos falta por perder, evitar el desgaste total, no transmitir siquiera un desaliento frente a los invasores.

         Nosotros somos dinastía de afligidos pero poseemos el don ubicuo de estar en nuestras desolaciones con el nombre grabado en catarsis e inconformismo. Somos el mejor cuerpo de esta geometría, somos la democracia aprendida y los no gastados por el tiempo. El tren es nuestro, también la facultad de su uso; nos queda dignidad suficiente como para restaurar la evolución en sus comprometidos términos.

         Para después de la derrota consideraremos las metas y fortificaremos los muros que la parca nos agrietó; fustas de libros para el nuevo salvamento; juncias de versos, pliegos de emociones, canciones que hablen de nosotros, hombres que sean nuestros hombres no aquellos débiles que no supieron, no aquellos avaros que no quisieron, no aquellos intrépidos que se dejaron la metralla y se llevaron nuestra certidumbre. No más miserables en nuestras páginas, nosotros sabremos escribirnos el futuro.

 

 

 

 

         RAMÓN LLANES

EN LA BÚSQUEDA

 

EN LA BÚSQUEDA

 

 

Busco un sol para mis sombras,

un recuerdo para mi olvido,

un canto para mi boca,

busco

unos silencios que necesito.

 

 

Ramón Llanes. De UN SOPLO DE MI VIDA

COMARCAS DE HUELVA

 COMARCAS DE HUELVA

 

 

         Con ánimo útil -sin aviso ni deseo de polémica pero sin rehuirla si se diera el caso-,  consulto algunos aspectos del catálogo elaborado por la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía de 27 de marzo de 2003, a fin de comprobar la modificación sobre la comarcalidad de la provincia de Huelva. Se observa, con cierto desencanto, que ya no es lo que era y tampoco sabemos por qué se han cambiado las comarcas ni bajo qué simbología o capricho.

         Los datos apuntan a la constitución de  6 comarcas: El Andévalo, El Condado de Niebla, Costa Occidental, Cuenca Minera, Comarca Metropolitana de Huelva y Sierra de Aracena y Picos de Aroche. A su vez El Andévalo se compone de Alosno, Cabezas Rubias, Calañas, El Almendro, El Cerro, El Granado, Paymogo, Puebla de Guzmán, San Bartolomé de la Torre, Sanlúcar de Guadiana, Santa Bárbara, Valverde, Villanueva de Las Cruces y Villanueva de los Castillejos. El Condado de Niebla, se configura con los municipios de Almonte, Beas, Bollullos, Bonares, Chucena, Escacena, Hinojos, La Palma, Lucena, Manzanilla, Niebla, Paterna, Rociana, Trigueros, Villalba y Villarrasa. Forman la Costa Occidental: Ayamonte, Cartaya, Isla Cristina, Lepe, San Silvestre y Villablanca. Pertenecen a la Cuenca Minera: Berrocal, Campofrío, El Campillo, La Granada, Riotinto, Nerva y Zalamea. Forman la Comarca Metropolitana de Huelva: Aljaraque, Gibraleón, Huelva, Moguer, Palos, Punta Umbría y San Juan. Y se compone la Sierra de Aracena y Picos de Aroche de: Alájar, Almonaster, Aracena, Aroche, Arroyomolinos, Cala, El Castaño, Corteconcepción, Cortegana, Cortelazor, Cumbres de Enmedio, Cumbres de San Bartolomé, Cumbres Mayores, Encinasola, Fuenteheridos, Galaroza, Higuera de la Sierra, Hinojales, Jabugo, La Nava, Linares, Los Marines, Puerto Moral, Rosal, Santa Ana, Santa Olalla, Valdelarco y Zufre.

         Sobre tal configuración se pueden apuntar algunos datos que sirvan para mejor entender estas modificaciones que no responden a la idea general de “comarca”. La formación histórica refería desde el siglo XIX las siguientes comarcas: El Andévalo, La Costa, El Condado, La Campiña y La Sierra. Y en tal sentido su formación respondía al criterio de identidad entre personas, orografía, recursos, etc, figurando El Andévalo con 22 municipios que abarcaba desde Villablanca hasta La Granada y desde San Bartolomé a Santa Bárbara. El Condado tenía la misma formación actual excepto Trigueros y Beas que pertenecían a la Campiña. A La Sierra pertenecían todos los indicados más Campofrío. La Cuenca Minera, es una denominación de nuevo cuño que no tiene raíz histórica y que toda la municipalidad actual estaba encuadrada en El Andévalo excepto Campofrío. La Campiña se formaba con Gibraleón, Beas, Trigueros y San Juan. La actual Comarca Metropolitana tampoco tiene raíz histórica y es una denominación reciente. El Condado se componía de los municipios actuales menos Beas y Trigueros y con el añadido de Moguer y Palos. La Costa, compuesta por todos los municipios que tienen linde con el mar, por tanto no pertenecían a ella Villablanca ni San Silvestre y sí pertenecían Aljaraque y Huelva. Existía también una especie de subcomarca llamada Arenas Gordas que recogía toda la costa desde Mazagón hasta la desembocadura del Guadalquivir en Doñana pero su vigencia quedó fuera del uso cotidiano.

         Esta fórmula de distribuir el territorio ha constituido desde sus inicios una manera de identificar habitantes y más nos inclinamos por el acierto de la histórica denominación que por la actual. Cuenca Minera en la provincia de Huelva podría llamarse a casi el 70% del territorio y no solo al actual. Y tampoco compartimos la creación de nuevas denominaciones que quizá no sean fruto de esa característica principal de la idiosincrasia de sus habitantes y respondan a otros criterios distintos de los que la normas establecen para determinar la comarcalidad. Es nuestra opinión.

 

 

         Ramón Llanes.