Un grito de mar por la Paz rota, un recuerdo para quienes se mueren en las orillas sin alcanzar los sueños, una necesidad de buzo valiente para desahogar a los perdidos, una arena blanca y fina como esta para los pies cansados de quienes se juegan la vida en las viejas barcas. Un algo más de complicidad con los hombres que trabajan por aniquilar las guerras, un detalle limpio por la Paz de todos, un cielo calmo para las razas, un compromiso constante para ayudar a los sin suerte. La Paz es un derecho, una premisa imprescindible para la felicidad. La paz somos tú y yo, si queremos. Ramón Llanes.
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