LO DEL FÚTBOL
No solo ganar es una victoria, también es victoria mostrar la cara amable y convivencial del fútbol, sacarle los colores solidarios, unir a las familias en torno a un balón y en todo caso a un acto de complicidad muy necesario en tiempos de sofoco y desalientos; también es victoria conversar de lo nuestro mientras se miran las áreas, estudiar el comportamiento a veces torpe, a veces acertado, de contrincantes, espectadores, sistemas organizativos, prensas, vicios, poderes, etc; la victoria también conlleva una parte de derrota y viceversa, quizá los vencedores guardan en su bolsillo algún desencanto y los perdedores no esquivan su pequeña gloria de aquello bien hecho; para llegar a la victoria se han sufrido en el campo muchas derrotas.
Me quedo con la alegre emoción de unos y comparto la triste decepción de otros, me quedo con el aprendizaje del fútbol que bien parece la misma vida pero una victoria o dos o seis o mil no exigen desenfreno, desorden y maledicencia. La victoria es efímera, la consecuencia puede ser desagradablemente inadecuada. Las dos son poesía.
Ramón Llanes 10.7.2024.
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