Nacimos
de casta transparente
de
subsuelo y árbol, de líquido,
crecimos
de pan, de canción, de verso,
de
trapío suelto, de aceite los domingos,
de
sorpresas y entre bondades,
nacimos
libres
de
mordazas y de lujos, abajo nacimos,
no
cabíamos en las nubes.
De
ahí mis consecuencias, el lápiz, la mirada,
el
paisaje, la risa, el traspiés,
la
medio llena botella del deseo.
Querrás
oír dónde parió mi madre,
en
un camastro de valentía,
claro
que, entre besos.
RAMÓN LLANES. (del poema MUÉRETE EN ABRIL, del libro MEMORIA DEL PRÓDIGO)
No hay comentarios:
Publicar un comentario