EL DERECHO AL BUEN MORIR
Mientras
unos de nuestros representantes entienden el derecho al buen morir como demanda
de la sociedad e intentan legislar con los debidos controles, la eutanasia,
otros representantes acuden a la tópica razón de la rotunda negativa porque tal
derecho conlleva una despiadada desprotección de la vida. Argumentan que la
eutanasia es un empujón hacia la muerte.
Supongo que
olvidan que legislar contra derechos, con recortes en sanidad, en educación y
en vivienda, son empujones hacia la muerte desde la vida. Que cuando no se
atiende adecuadamente en medicamentos, en igualdad y en atenciones se está
desprotegiendo la vida. Que esa fórmula de gobernar produciendo cada vez más
desniveles sociales es la eutanasia más cruel por no ser consentida por el ser
humano afectado ni por los familiares más próximos. Supongo que olvidan que
cada bomba produce una eutanasia no querida, que cada caída en la pobreza
incita a ella, que cada desahucio es una desprotección de la vida. Supongo que
lo olvidan.
Ramón
Llanes. Otoño 2018.
No hay comentarios:
Publicar un comentario