APRENDIENDO A DESCONFIAR
Está en nuestra moda dudar de lo obvio y desconfiar por costumbre, algunos se han ocupado de enseñarnos mientras nosotros aprendemos con ligera solvencia; si digo que me cuentan que otro gana treinta mil al mes, se cree o se pone en duda dependiendo de quién sea el beneficiado, si además añado que se trata de un político se despeja la duda; si anuncio que mañana repartirán billetes de veinte euros en la plaza, dando detalles concretos de tal verdad, todos lo asumirán como positivo, si además añado que lo ha dicho un político nadie irá ese día a la plaza; si comento que ha dicho el delegado de las aguas que lloverá el domingo, no será oído ni creído. ¿Significa ello que desconfiamos y dudamos de todo y de todos?, no; significa que estamos aprendiendo a desconfiar de los políticos y que pronto sabremos desconfiar de nosotros mismos.
Ramón Llanes.
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