ALGO TAN ABSURDO COMO EL HAMBRE
Anda
por ahí el hambre estrangulando vidas sin dañar siquiera una simple conciencia.
Los estudios demográficos y sociológicos apuntan que es suficiente el alimento
que se produce para satisfacer todas las necesidades de la población, que solo
la falta de imaginación y solidaridad evitan una redistribución más adecuada de
los recursos; significa, según los estudios aludidos, que el planteamiento
primigenio deba modificarse a fin de conseguir lo que las organizaciones humanitarias
vienen demandado. El destino de las riquezas, que es la plusvalía que genera el
trabajo, ha de ser aquel otro mundo que parece juega a morir en nuestro
anverso, sin una atención preferente ni una gota de nuestro compromiso.
En
nuestro estado de bienestar las cosas se discuten hasta la saciedad menos el
hambre de los otros, ese distintivo no lo llevamos puesto, se nos olvidó en la
mochila que hace tiempo dejamos en nuestra indiferencia. Para qué nosotros!,
nosotros no somos poderosos ni gobernantes, no tenemos responsabilidades, no
podemos exponer nuestros valores; que busquen a otros con perfiles distintos,
que busquen entre los héroes que se gastan los sueños luchando contra mil
mundos como el nuestro para solucionar el hambre en un mundo maldecido por la
ignorancia.
Mañana
llegarán inmigrantes a nuestras playas, se habrán puesto de frente al miedo y
habrán conseguido alcanzar una parte pequeña de ese sueño grande; mañana mismo
el sentimiento de muchos habrá cambiado desde su propio valor y nuestra sociedad
mirará el noticiario a la hora del almuerzo para acaso derramar un suspiro de
pena hacia los recién llegados; mañana mismo nos habremos desocupado de ponerle
valentía a la esperanza. Somos muchos, demasiados, y tenemos un poder económico
repleto de fórmulas capaces de acabar con toda esta lacra indigna que algún día
nos soplará el cuello y nos colgará la culpa personal para descrédito de las
generaciones venideras. No entendemos de responsabilidades pero sabemos
entender cuándo el hambre nos avisa. Solo era eso.
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