NO ME ESPERES.
Nunca me esperes,
puedes gritarlo desde la inercia de tu verdad
y soltarlo como agua agónica
en el gemido de la fuente.
Nuestros padres se esperaron tanto,
se volcaron tanto, perdieron tanto,
la culpa se ha ceñido a nuestro miedo.
No me esperes, mira hacia adelante,
comprende al maquinista,
hazle sol a las ansias
y deja caer una lágrima de ironía
en la pozanca oscura de la noche
y prepárate para continuar
escarbando la tierra.
Ramón Llanes. (MINERALOGÍA DEL ALMA)
No hay comentarios:
Publicar un comentario