REMANSO
Nada es agitación en las claras del día, los pájaros permanecen, el idilio cuelga de las ramas, las avispas van y vienen, el agua del pozo es aun espejo libre, huele a remanso, hay reminiscencia de quietud en el semblante inequívoco de los humanos, la atmósfera sin embargo mantiene el eco de una discusión sociológica promovida más por la ideología que por la razón y se provocan grescas cuando el sinsentido intenta impedir la evolución de la mente y de la sociedad; se me queda el cuerpo con más ambición por el solsticio y por las largas tardes, que a los candidatos a la efeméride de la discordia les aplaudan sus dogmas intransigentes, que al pozo no se muerda ni siquiera se moleste a las palabras por burdas salvaciones patrióticas, que la paz se nombre. El remanso es ahora una deseada cualidad de la vida. Dígame usted.
Ramón Llanes
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