Recio Moya, Rodolfo
Fuenteheridos.
CORTEGANA
Ansias de ti florecen por mi piel,
ansias que son anhelos de tenerte
en la respiración, en la mirada,
en las lenguas de azogue de tus fuentes,
en la brisa que sopla en tu Altozano,
en las flores que pueblan Vista Alegre,
Montepino, Potroso, Jabaliega,
molino de la Presa de Valiente,
en el bello encinar de Prado Hondo,
en tu castillo, elegante y fuerte,
en tu industria famosa de tapones,
de colmenas y discos para redes;
en tu San Telmo y tu Valdelamusa,
en tus destilerías de aguardiente,
en los casinos grandes de tus plazas
o en tus calles de piedras florecientes,
-que siendo Cortegana un paraíso
la hierba entre las piedras amanece-.
Ansias de ti, que lleguen a mi alma
como llega el resencio a los claveles...
Cuando en tu Nazareno y tu Piedad
se quedó la plegaria de tu ausente,
se quedó el corazón enmarañado
en el dulce carácter de tus gentes,
se quedó la mirada embebecida
en el castaño amigo, ¡verde...verde!.
Se quedaron mis brazos sujetando
la ilusión de vivirte para siempre;
mis dedos, engarfiados cual sarmientos
de una vid que ha perdido su simiente
se agarran al amor de tu memoria...
¡Cortegana!...a fuerza de quererte!.
De la Antología HUELVA ES VERSO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario