SOLDADO
El soldado distrae su mirada
en la estepa desierta, solo huellas
de sueños reflejan la respiración
Hace miedo, hay miedo en la arena
por expresa voluntad del recuerdo
no perdido. Huellas que no conducen
a futuro, huellas casi inapreciables
para los buitres de la memoria.
A la vista de la tarde el deseo
de estar acariciado en unas manos
sobrado de tiempo hasta la perplejidad.
Suena el dolor, la excitación se desprende
del gesto, se pierde en el páramo.
Nadie posible acerca la palabra
y el soldado desmiente a la soledad
con balas de fogueo
hasta hundirse en un abismo
y decidir perderse
en la excusa del poema.
Ramón Llanes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario