A TODAS LAS MUJERES DE LA SASTRERÍA DE MI PADRE

Mi padre era sastre y en casa todo el paisaje estaba ocupado por mujeres. No consiento que fuera lugar de trabajo para ellas que pasaban todo el día con nosotros haciendo la costura exigida y también la ayuda a mi madre en las propias labores del menester cotidiano; aquello, entonces, olía mucho a vida y mis hermanos y yo formábamos parte del sentimiento de todas las mujeres que hicieron de nuestra casa un enjambre de afectos.

Ha pasado casi todo el tiempo y no soporta mi memoria ni una pizca de olvido, las mujeres de la sastrería de mi padre incluidas mi madre y mi tía María San Marcos, me están sonriendo en la faz inquieta de mis recuerdos de niño y vengo a dedicarles el homenaje con honor a tanta entrega que nunca pude hacerles y que siempre merecieron, por cuanto nos amaron.

Ramón Llanes. Tharsis 8 marzo 2018.